Organizar una iniciativa de forma que vaya a ser exitosa toma tiempo, ya que no es algo que pasa automáticamente. Lo mejor sobre invertir tiempo para el crecimiento de tu empresa es que se reciben buenos retornos y vale la pena. Similar a recibir los intereses de dinero invertido, dedicar tiempo para asegurarse de que un proyecto empiece con el pie derecho te ayudará a alcanzar tu meta y te garantiza que siga funcionando eficientemente en el futuro.
Digamos que te interesa empezar un blog para la compañía y tu meta es al final del año tener tres meses de blogs subidos a tu sitio por adelantado. Tal vez lo que deseas es establecer un proceso de contabilidad mensual en la compañía que se realice de forma precisa y puntual con mínima intervención de gerencia. Ambas son metas alcanzables. Puede ser que no sea fácil alcanzarlas, pero todo lo que se requiere es una inversión de tiempo y esfuerzo.
Pasos para invertir
1. Ponte una meta
Para llegar a un destino, es importante primero saber a dónde quieres llegar. Aunque tal vez tengas una idea general del objetivo, es útil tener una meta que se pueda medir, lo que incluye tener datos de tiempo y cantidades para garantizar que tu destino sea 100% claro.
En el ejemplo ya mencionado del blog, la meta puede ser esta:
Para el final del año, desarrollar un sistema en el que los blogs semanales de la compañía se suban y estén listos para publicarse tres meses por adelantado.
Si la meta está clara, lo que tienes que hacer para alcanzarla será obvio. En otras palabras, las brechas entre donde estás hoy y el lugar al que debes llegar son más aparentes.
2. Diseña
Conforme los pasos para alcanzar tu meta se vuelven más claros, escríbelos y haz un plan. Las ideas pueden no ser muy obvias al principio, pero el simple hecho de escribirlas te puede ayudar a empezar a crear las acciones que vas a tomar. Trata de organizarlas en un plan con fechas y pasos lógicos.
Mientras más detallado sea el plan, más probable será que tu proyecto despegue. Cuando establezcas la estrategia, incluye también el diseño de la estructura que utilizarás para que el proyecto sea automático y sostenible a largo plazo. Esta estructura puede incluir contratar personas, establecer procesos e invertir en sistemas.
Diséñalo de tal forma que el sistema sea resiliente con redundancias de ser posible para que, si algo falla, la estructura entera no se desplome. Asegúrate también de intentar resolver cualquier problema que puedas prever en la fase de diseño, ya que es mucho más fácil hacer modificaciones en este punto. Es mucho más simple hacer cambios en el papel que cuando las cosas ya están en marcha.
3. Establece la estructura
Sigue tu plan y empieza a crear un esquema permanente. Mientras más complejo sea el proyecto, más piezas deberán colocarse adecuadamente. Aparta tiempo para asegurarte de que la estructura funciona bien. En esta fase, puede ser que te des cuenta de que algunos de los pasos que tenías originalmente en tu plan son más fáciles o difíciles de lograr de lo que habías pensado. En ese caso, tal vez tengas que alterar el plan, pero está bien si estos nuevos pasos te llevan a tu destino.
4. Prueba y error
Permitir espacio para el aprendizaje es crucial. El proyecto nunca resultará perfecto en el primer intento, lo que es completamente normal. La iteración es extremadamente importante para conseguir el mejor sistema posible.
Cuando empecé a contratar trabajadores independientes para ayudarme a publicar mi blog, no estaba segura de qué era lo que necesitaba. Pasé por tres procesos de contratación hasta que encontré a mi actual administradora de blog, Violeta, que es maravillosa y tiene mucha experiencia. Me alegra haber tenido esta fase de experimentación porque, de no haberlo hecho, nunca la habría encontrado.
5. Actualiza
Una de las constantes de la vida es que las cosas siempre están cambiando y, para estar al día, los procesos y sistemas deben actualizarse con regularidad. Las regulaciones, requerimientos y miembros del equipo cambian constantemente. Además, para seguir dando el máximo, tenemos que innovar continuamente. Tener una mente crítica y buscar maneras de mejorar son siempre prácticas saludables.
Invertir esfuerzo produce amplios rendimientos. Dedicar tiempo a preparar todo lo necesario por adelantado hará una gran diferencia en los rendimientos que obtengas de los proyectos que inicies. Las estructuras que desarrolles hoy te beneficiarán durante semanas, meses y hasta años. La persona que serás en el futuro te lo agradecerá.