En un mundo que se mueve tan rápido, fácilmente podemos empezar a creer que todo lo que invertimos dará frutos de inmediato. Sin embargo, la mayor parte del crecimiento tiende a ser orgánico, no exponencial. Por supuesto, a veces experimentaremos un crecimiento exponencial, pero, aun así, el crecimiento exponencial no puede mantenerse indefinidamente.
Por tanto, ya sea que estemos trabajando en un nuevo proyecto o en el desarrollo personal, debemos recordar que el crecimiento a veces es lento y otras veces completamente imperceptible. Pero el hecho de que el crecimiento pueda parecer así no significa que no esté ocurriendo o que no estemos teniendo un impacto, y no significa que debamos detenernos solo porque no vemos resultados externos.
Podría haber tenido mucha más paciencia, pero nunca antes había intentado hacer algo tan ambicioso. Entonces, continué. Todos los días invertía en un proceso nuevo o un sistema nuevo. Todos los días trataba de mejorar la forma en que trabajábamos. Todos los días analizaba cómo estaban configurados nuestros equipos y qué podíamos mejorar. Poco a poco, todos invertimos en Celaque.
Eventualmente, algo comenzó a funcionar, algo que nunca había funcionado antes. En poco tiempo, otra área de la compañía también lo hizo. Como estaba, en aquel entonces, tan acostumbrada a ver pocos resultados, el buen funcionamiento de un área me tomaba por sorpresa.
Y luego empezó a pasar por todas partes: cada parte empezó a florecer, poco a poco. Y ahora puedo decir que la mayor parte de la compañía está operando como siempre soñé que lo haría. Todavía tengo trabajo por hacer, y me atrevo a decir que mi trabajo nunca terminará, pero hemos recorrido un largo camino y estoy muy orgullosa de lo que hace mi equipo todos los días.
Somos como el bambú cuando empieza a crecer. Antes de crecer, el bambú desarrolla un complejo sistema de raíces bajo tierra que es invisible. Y luego, cuando las raíces del bambú están listas, los tallos se disparan, aparentemente de la nada. Nuestros proyectos, desarrollo personal y compañías se comportan de la misma manera: nunca sabemos cuándo llegarán los resultados o cómo se verán. Solo podemos creer en nuestro proceso, trabajar en él de manera constante y mejorarlo a medida que avanzamos.
Si necesitas escuchar esto y te sientes trabada, sigue adelante. Tu puedes. Confío en que lo lograrás.