La paciencia y los procesos
Cuando implementamos un proceso nuevo en una compañía, se necesita tiempo para encontrar un nuevo ritmo de trabajo. La rutina y los hábitos deben cambiar, y el equipo debe adaptarse a la nueva forma de hacer las cosas. Se requiere paciencia y, a veces, en medio de la transición, puede que te preguntes si en verdad funcionará.
Pero cuando la implementación se ha completado con éxito, es algo hermoso. El proceso en el que has estado trabajando ahora opera de forma independiente sin que tengas que hacer nada al respecto. El equipo, los sistemas y los procesos se han adaptado, y la nueva forma de hacer las cosas es el nuevo normal.