Encontrando enfoque en un mundo lleno de proyectos y distracciones
Como gerentes, mucho de nuestro trabajo diario gravita alrededor de resolver problemas; pasamos de un asunto a otro y trabajamos para solucionarlos todos. Nos toca aprobar transacciones o discutir con otros sobre cómo proceder con temas que estamos enfrentando. Este tipo de trabajo requiere ser capaces de resolver una tarea a la vez y reaccionar con rapidez.
Pero hay otros momentos en los que requerimos hacer un tipo de trabajo más intenso. A veces tenemos que profundizar e investigar sobre un tema nuevo. O puede ser que nos toque pensar sobre un problema al que no le vemos solución o empezar y avanzar en un proyecto desafiante que requiere de toda nuestra concentración. Aquí se necesita un tipo de desempeño diferente, uno en el que tomamos el tiempo para sumergirnos en un asunto y pensarlo a fondo.