He estado experimentando con cambios incrementales durante algunos años. He descubierto que al hacer los cambios que quieres hacer, poco a poco, puedes crear lo que deseas a lo largo del tiempo. Este concepto funciona para todo: hacer ejercicio, leer, escribir, trabajar en proyectos, o cualquier cosa que requiera motivación y dedicación. Mejorar un poco cada día resultará en cambios a largo plazo que nunca imaginaste.
La idea es hacer un poco cada día, aunque sea solo por unos cuantos minutos. Tal vez no parezca mucho, pero con el tiempo se acumulará. He llegado a pensar que la mejor manera de crecer es a través de un enfoque implacable. Se necesita disciplina y paciencia porque los efectos no son asombrosos de inmediato, pero con el tiempo llegan a serlo. Si encuentras un poco más de tiempo (aunque no es necesario), puedes empezar con unos minutos al principio y luego avanzar hasta media hora o una hora para alcanzar la meta que estás buscando.
Dado que estás trabajando en incrementos, a veces podrás sentir que no estás progresando. Sé lo que se siente. Lo que pasa es que todos queremos resultados inmediatos. Pero además tenemos muchas otras responsabilidades, y el progreso incremental es muchas veces la única forma de encontrar el tiempo para alcanzar nuestros objetivos.
Normalmente tengo varios proyectos en marcha al mismo tiempo. Para avanzar en todos ellos, reservo unas horas al día para atenderlos. En algunos casos, como cuando estaba escribiendo mi libro, no vi ningún resultado de mi trabajo, excepto la acumulación de palabras. Lo mismo ha sucedido con mi lectura: sigues esforzándote por hacerlo y parece no hacer mucha diferencia. Pero luego, cuando miras hacia atrás, ¡de repente ya has leído docenas de libros o lograste escribir un libro!
Mi trayecto de lectura
He estado leyendo aproximadamente un libro a la semana durante más de cuatro años. El proyecto comenzó porque empecé el programa de educación clásica de Susan Wise Bauer como se describe en su libro La mente bien entrenada: una guía para la educación clásica en casa (biblioteca pública), y esta es la lista de libros en los que me he enfocado los pasados cuatro años.
Había querido leer los clásicos durante mucho tiempo, pero no tenía idea de cómo iba a completar los libros, así que me puse ese objetivo específico. Cuando comencé, apenas lograba completar un libro a la semana y sentía que no estaba haciendo mucho. Sin embargo, con el tiempo, los libros empezaron a acumularse y, mirando hacia atrás, he leído más de 200 libros (incluidos los clásicos y otros), que de otro modo no habría completado sin ese objetivo.
Y luego, lo genial del cambio incremental es que siempre puedes agregar más. Este año, decidí que quería pasar al siguiente nivel porque tenía una lista de aproximadamente 50 libros en mi lista para leer, que se hace cada vez más larga, así que comencé a escuchar libros en Audible.
Los audiolibros han abierto una opción completamente nueva para mi lectura. Ahora escucho mientras hago ejercicio o cuando tengo un tiempo de inactividad. Estoy escuchando un libro extra por mes.
El valor del trayecto
Estos libros me han cambiado a mí y mi forma de pensar. He encontrado docenas de ideas fabulosas que he aplicado en mi compañía y me han dado la confianza para escribir mi libro. A medida que aumento mi capacidad, cambio.
Los libros me han ayudado en más formas de las que puedo contar, desde convertirme en una mejora administradora hasta aprender a ser una madre más eficaz, y ahora soy una persona diferente gracias a ellos. He aprendido sobre los antiguos estoicos y el poder de los hábitos; me maravillé de personajes tan icónicos como Anna Karenina y Elizabeth Bennet; viajé en la antigua Grecia con Heródoto. Siento que he vivido a través de los ojos de 200 autores que han enriquecido generosamente mi vida.
¿Qué te gustaría lograr mediante el progreso incremental? Empieza hoy; no te arrepentirás.