Las demandas del día a día pueden ser abrumadoras. Nuestra lista de pendientes es interminable, y el paso de los avances tecnológicos sigue acelerando. Puede parecer como que, tan pronto como nos adaptamos a una nueva tecnología, ya debemos aprender algo nuevo. Aunque existen ciertos principios básicos que nunca cambian, el ruido a nuestro alrededor es constante.
Antes del Internet, solo teníamos acceso a la información que estaba físicamente disponible a nuestro alrededor, como periódicos, libros, la televisión o hasta conversaciones con colegas y amigos. Hoy, muchas barreras de la información han sido eliminadas y esto, junto con la creación de contenidos de comunicadores que anteriormente no podían comunicarse, hace que sea difícil distinguir entre lo que es importante y el relleno.
Paradójicamente, debemos ir más lento para aumentar nuestro impulso y ser más efectivos.
Formas de darle sentido al ruido
Lee e investiga
Leer a profundidad e investigar sobre temas desconocidos te ayudará a discernir lo que en realidad importa y cómo el contexto a tu alrededor, incluyendo la tecnología y tu industria, evolucionan. El conocimiento es la herramienta más importante que tenemos. Mientras más conozcas del mundo a tu alrededor, mejor preparada o preparado estarás para responder de forma proactiva.
Escucha
Conoce de qué hablan las personas a tu alrededor. Escucha las opiniones contrarias a lo que tú piensas o crees. Estas opiniones diferentes son las más importantes ya que solemos filtrar lo que no encaja con nuestra percepción; escuchar estas opiniones opuestas puede ayudarte a expandir tu mente y tu forma de pensar. Además, si tienes que tomar una decisión importante, encuentra formas de tomar esa decisión como equipo, con tantos puntos de vista diversos como sea posible. De este modo, podrás conseguir un resultado mejor, más informado y más completo.
Prueba tu entorno
Cuando no sepas qué camino tomar, prueba tu entorno mediante experimentos de poco riesgo. Estos experimentos te permiten descubrir la realidad de lo que pasa a tu alrededor. Si tienes una hipótesis, diseña experimentos que aclaren la situación en particular. Por ejemplo, si quieres diseñar un producto nuevo para tu negocio de consultoría, pero no sabes cómo responderán los clientes, puedes iniciar con una prueba con clientes leales para ver si les gusta. Entonces podrás obtener información para decidir cómo continuar con tu proceso.
Despeja tu mente
Para despejar tu mente, haz lo que sabes que tienes que hacer pero que todavía no has hecho. Esas tareas que siguen apareciendo en tu mente te están notificando por una razón. Supongamos que hay 20 cosas que no has empezado en tu lista de pendientes. Cuando las escribas y empieces a ejecutarlas, descubrirás tareas que ya no son importantes o relevantes para ti en cuanto las escribas. Puedes olvidarte de estas y empezar a despejar espacio valioso en tu mente (Cómo vaciar tu mente para un mejor desempeño y resolución de problemas).
Si no sabes dónde empezar con las tareas que debes completar, toma cualquier acción para comenzar. También puedes dividir el proyecto en partes más pequeñas o programar tiempos específicos durante el día para seguir adelante. Para saber más sobre cómo empezar tus proyectos, lee en mi blog Cómo empezar tu siguiente proyecto de forma efectiva.
Para empezar a eliminar elementos de tu lista de pendientes de forma más efectiva, intenta trabajar con un asistente virtual (Asistentes virtuales y cómo pueden mejorar tu negocio). Ella o él puede ayudarte a completar las tareas que están pendientes y de las que no te has encargado. Con una mente más despejada, tendrás más espacio mental para prestar atención a lo que pasa a tu alrededor en tiempo real.